10 pueblos de España recomendados para visitar
La Guía Repsol, que en este 2014 cumple 35 años, ha seleccionado los diez pueblos españoles que destacan por sus lugares especiales y por ser el sitio perfecto donde disfrutar de una escapada inolvidable. Se trata de enclaves con un espectacular encanto para pasar unos días, y desconectar de la realidad y del estrés.
Para su selección se ha teniendo en cuenta su originalidad, su patrimonio cultural y gastronómico, y su belleza. En España contamos con una riqueza y diversidad de pueblos y villas envidiable para perderse por sus calles, disfrutar de su patrimonio artístico y cultural, así como de su cocina.
Vamos con los 10 pueblos de España que no te puedes perder.
1. Baeza (Jaén)
Localidad declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, tiene un legado artístico increíble. Baeza guarda numerosos monumentos e iglesias de gran interés, como su catedral, su muralla o sus palacios renacentistas. Está bañada por los ríos Guadalimar y Guadalquivir, alberga a su vez preciosos paisajes y a parques naturales donde habitan miles de aves y fauna salvaje.
2. Besalú (Gerona)
A Besalú se accede a través de un puente románico del siglo XII y acoge un rico patrimonio medieval que se reconoce a través de sus empedradas calles. Es imprescindible perderse por las callejuelas del barrio de la judería y aprovechar para visitar los baños medievales, dedicados a las abluciones rituales hebreas.
3. Cudillero (Asturias)
Localidad con un marcado espíritu marinero, cuenta con un extenso y rico patrimonio cultural en el que destaca su extraordinario faro situado sobre un acantilado de más de 75 metros. Cudillero se caracteriza por sus casas que descienden escalonadamente por la ladera hasta llegar al puerto, el municipio esconde preciosos palacios e iglesias como el de El Pito o la Iglesia parroquial del mismo nombre.
4. Frías (Burgos)
Frías ofrece un extenso conjunto monumental en el que cabe destacar el extraordinario castillo, las iglesias de San Vicente y San Vítores, además del puente romano y medieval. Con el Río Ebro a sus pies, Frías cuenta con una privilegiada situación geográfica donde poder hacer excursiones por dos maravillosas comarcas burgalesas: La Bureba y Las Merindades.
5. Fuenterrabía (Hondarribia, Guipúzcoa)
A los pies del Monte Jaizkibel, bañada por el Mar Cantábrico y la Bahía de Txingudi, se ubica esta localidad que tiene un fácil acceso y hace frontera natural con Francia. La costa de Hondarribia ofrece un paisaje abrupto donde se forman impresionantes acantilados.
6. Morella (Castellón)
Morella, Conjunto Histórico Artístico, se erige a los pies de su castillo, donde íberos, celtas, griegos, romanos y árabes han dejado huella. Recorrer este privilegiado espacio y perderse entre sus calles porticadas, sus casas solariegas, sus mágicos rincones y su rico patrimonio cultural es una maravillosa experiencia para el viajero.
7. Pedraza de la Sierra (Segovia)
Pedraza de la Sierra cuenta con magníficas murallas, casas señoriales y palacios medievales de los siglos VIII y XV. Es obligatorio dar un paseo por el Castillo de La Pedraza, la Iglesia de Santa María y la Plaza Mayor. La localidad está rodeada por pequeños montes cubiertos de enebros y sabinas.
8. Ronda (Málaga)
Se trata de uno de los Pueblos Blancos andaluces más destacables, que permanece dividido por el Tajo. Ronda deleita con sus reminiscencias árabes y trazado medieval. Además aporta maravillas arquitectónicas, como la plaza de toros, pero esta bella localidad enamora también por su entorno y sus gentes.
9. Toro (Zamora)
Toro, a 739 metros de altitud, resiste imperturbable el paso del tiempo. La tranquilidad de esta villa que nace junto al Duero está bañada por el río que riega su fértil vega, donde se cultivan cereales, hortalizas y la vid del muy apreciado vino de Toro. Es obligatorio perderse por sus calles que siguen una estructura en forma de abanico y llegar a su centro, donde se encuentra la colegiata de Santa María la Mayor, del siglo XII. Está declarado como Conjunto Histórico Artístico.
10. Trillo (Guadalajara)
Trillo cuenta con un entorno recio y austero, bañado por el paso de un joven y cristalino río Tajo. El viajero disfrutará de un cálido paseo por sus casas solariegas o por el Monasterio de Santa María de Óvila, fundado en el siglo XII.