10 cosas a tener en cuenta para escoger la mejor tarjeta de crédito

Las comisiones son costes que la entidad bancaria fija para el uso de los servicios de la tarjeta de crédito. Generalmente, los más habituales son el coste de emisión (cuando se otorga la tarjeta) y el de mantenimiento (al momento de hacer la renovación anual del plástico).

Los términos y condiciones de la oferta de cada banco deben detallar estos cargos al consumidor antes de la firma del contrato. Leer detalladamente y elegir las mejores tarjetas de crédito que tengan las comisiones más bajas puede significar un importante ahorro de dinero en el medio plazo.

Otro de los factores importantes es la tasa de interés, que es el coste financiero adicional que se paga al financiar una compra con la tarjeta de crédito. Mientras mayor sea su valor, más tendrá que pagarse para devolver el dinero prestado por la entidad, por lo que es indispensable escoger la oferta que tenga asociada una tasa menor.

El límite de compra es un valor que establece el banco para cada cliente de acuerdo con su nivel de ingresos, y que fija el importe máximo por el cual puede financiar sus compras. Esto quiere decir que tanto las compras individuales como la suma de todos los consumos no cancelados deben ser menores a esa cifra.

Muchas entidades cobran comisiones por cambio de divisa al utilizar la tarjeta en el extranjero. Es necesario asegurarse de si se aplican o no estos costes antes de utilizar la tarjeta fuera del país.

Antes de pedir una tarjeta de crédito es clave conocer las ventajas de su uso. Contar con un crédito inmediato disponible en cualquier momento puede ser muy útil cuando se tengan que afrontar gastos imprevistos.

La capacidad de pago del cliente es la que determina el límite de financiación de la tarjeta de crédito. Una nómina mayor o un historial crediticio sólido pueden permitir incrementos periódicos de este valor.

Se pagan por la demora al pagar las cuotas de la tarjeta. Mientras mayores sean, más alta será la penalización para clientes morosos.

Las condiciones de cancelación marcan los requisitos para dar de baja las tarjetas de crédito. Dependiendo de la cuenta con la que estén asociadas, los bancos pueden solicitar periodos de permanencia o pagos de cancelación de la deuda antes de desactivar el instrumento. Términos estrictos hacen más difícil el cambio futuro de la entidad por otra con ofertas más atractivas y favorables al cliente.

De acuerdo con el tipo de producto, algunas compañías pueden exigir la domiciliación de una nómina o un depósito mínimo antes de otorgar una cuenta bancaria. También los cargos por emisión son habituales al momento de solicitar una tarjeta de crédito. Por este motivo, es fundamental escoger el banco con menores comisiones y restricciones para la solicitud de la tarjeta, para evitar incurrir en costes innecesarios.

Junto con la posibilidad de financiar gastos, muchas entidades brindan beneficios extra con sus tarjetas de crédito, como descuentos en determinadas cadenas comerciales o devoluciones de dinero. Elegir un producto con beneficios convenientes puede marcar una diferencia en el presupuesto familiar.