10 extractos del libro 'Viajar a Japón te rompe la tarde' de José Señarís “Frikidoctor” y Sergio Fernández “El monaguillo”
"El Monaguillo llevaba cinco años en el programa de El Hormiguero mintiendo a la audiencia, haciéndoles creer que todas las semanas iba a Japón para traer los objetos más curiosos del país del sol naciente, pero no era cierto, jamás había estado allí. No sabía ni dónde estaba el desvío. El que de verdad viajaba era Frikidoctor, un tío más raro que un chino pelirrojo.
Para deshacer el entuerto, al Monaguillo no le quedó más remedio que coger un avión con destino a Tokio acompañado de Frikidoctor. Un viaje más movido que la maraca de un brujo, cargado de aventuras y mucho humor por el país más surrealista de todo el planeta."
1. Extracto 1
A los de Crepúsculo les encantaría vivir en Tokio porque se hace de noche muy pronto. Antes de que termine la telenovela del mediodía, ya se ha hecho de noche.
No es sitio para poner una empresa de placas solares y se venden muy pocas tarrinas de Nivea. Casi todo el mundo es blanco nuclear o, directamente, transparente. En Japón Iniesta puede pasar por rapero afroamericano.
2. Extracto 2
Tokio está lleno de luces y pantallas gigantes poniendo en bucle vídeos musicales de japoneses vestidos con ropa de colores que llevan seis cafés en el cuerpo y no paran de gritar. Se les ha ido la mano con las pantallas. Hay más televisiones que en la recepción de un bingo.
Es un sinvivir, estás más intranquilo que los padres de los niños de Stranger Things… Esos niños deberían centrarse en los estudios y dejar de ir a sitios en bicicleta.
Si mi madre viajara a Tokio y viera tantas luces encendidas, se volvería loca apagándolas. Las madres son muy de apagar las luces.
—¡Porque no hace falta tanta luz!
Y con esa afirmación te callan la boquita. Es verdad que a veces te preguntas quién pagará cada mes el recibo de la electricidad de Japón, ¡menudo disgusto se tiene que llevar ese señor!
3. Extracto 3
El taxi japonés no es como el taxi español. El japonés está lleno de tapetes de ganchillo para poner en el cabecero de cada asiento, pero no un tapete cualquiera, a lo loco. Son tapetes blancos de abuela, de esos que ponen en los sofás de sus casas. Teniendo en cuenta que Tokio tiene una de las mayores flotas de taxis del mundo, ¿querrá eso decir que los japoneses ponen a trabajar a sus abuelas de sol a sol haciendo tapetes?
4. Extracto 4
Los hoteles japoneses están muy limpios, son muy silenciosos, pero las habitaciones son muy pequeñas. Es más grande el pasillo. En Tokio el lujo es el espacio y tampoco estaba el presupuesto como para volverse loco. El problema es que como llevábamos tantas maletas para llenarlas de cacharros para la sección, había que tomar una decisión: o entran las maletas en la habitación, o entran las personas. Las dos cosas a la vez no eran posibles.
5. Extracto 5
Hotel Japón
Allí hice un descubrimiento: el váter. En Japón todo el váter gira en torno al chorrito de agua que te limpia al acabar. Un chorrito con muchísima puntería. Da siempre en el centro de la diana. Está muy bien pensado. Pero no os creáis que es cualquier cosa, no; está lleno de botones y controles con configuraciones para todos los gustos. Más que un váter parece la mesa de un DJ. Como estaba en japonés, me quedé mirándolo como mira un abuelo el mando a distancia de Movistar, sabiendo que si lo enciende igual le espera algo bueno, pero con un poco de desconfianza también.
6. Extracto 6
Genki Sushi es una cadena de restaurantes automáticos muy famosa. No hay camareros. Te sientas delante de un ordenador con el menú, vas marcando los productos que quieres y una cinta transportadora te trae lo que has pedido. Por suerte, el menú estaba en inglés y más o menos te enterabas. Los platos pasaban delante de nuestros ojos a toda velocidad, y había dos pisos por los que circulaban bandejas con la comida. Además, al llegar el plato, sonaba una campanilla para que lo retiraras. Si tardabas, empezaba a pitar. El sistema robótico no tenía paciencia ninguna.
7. Extracto 7
Centro comercial Donki
Los que dicen que salir de Ikea es complicado, es que no conocen el Donki. Son unos simples aficionados. Como te despistes en el Donki, te tiene que ir a rescatar Calleja.Centro comercial Donki
Los que dicen que salir de Ikea es complicado, es que no conocen el Donki. Son unos simples aficionados. Como te despistes en el Donki, te tiene que ir a rescatar Calleja.
8. Extracto 8
En Japón ser gaijin significa ser extranjero. Es un poco como la forma de hablar de los gitanos. Están ellos y los demás son los payos. Allí, o eres japonés, o eres gaijin. Y yo era el más gaijin que había en Tokio.
9. Extracto 9
Akihabara
Ese distrito también es el paraíso de los videojuegos de segunda mano, que ahora se llama retrogaming. Allí está Super Potato, la tienda especializada en el tema más famosa del mundo. La mascota es una patata que va andando muy sonriente, como un funcionario con dos días de asuntos propios.
10. Extracto 10
Si vais a Tokio, tenéis que ir a cenar con Soichiro Saito y saludarle de mi parte. Saito es un japonés enamorado de España que trabaja en Spain Club, una cadena de restaurantes españoles en Japón y es un tipo muy simpático. Sabe más de vinos y denominaciones de origen que cualquiera de nosotros y, además, se conoce todas nuestras expresiones y frases hechas.
Si le dices alguna que no conoce, la apunta en una libretita que tiene. Se podría decir que las colecciona.
Conmigo se puso morado a tomar notas. Le enseñé a decir «es mejor que tener pan congelao», «dúchate que sale económico» y «lo vamos a pasar pirata». Era un no parar, no le daba tiempo a guardar el cuaderno. Estaba más contento que un perro con dos colas.